No es común ver niños por las calles en horario
escolar. Lo habitual es verles apelotonarse a las puertas de los colegios,
quizá con más ansias de terminar que de empezar la jornada escolar.
Al igual que en muchos países, el absentismo es un
problema grande en España y mantenerse alejado de la escuela es uno de los
mayores problemas que amenazan el futuro de los países.
El absentismo de los estudiantes es una preocupación seria
de la sociedad y el sistema educativo, cuya consecuencia mayormente relacionada
con este problema es la alteración del ritmo de aprendizaje, que puede llevar a
la repetición de curso y al fracaso escolar. Pero lo que más preocupa son las
consecuencias a largo plazo, porque la falta de desarrollo de competencias
básicas dificulta poder llevar una vida personal, social y profesional adecuada,
cuya línea tiende a la marginalidad, el paro, la incultura, la delincuencia,
etc.
Investigaciones realizadas hasta ahora sobre los
estudiantes con ausencias injustificadas sugieren que su éxito académico es
inferior a los que asisten regularmente a las escuelas.
Entonces, ¿de quién es la responsabilidad? Básicamente,
de ti, de mí, de todo el mundo. Todo el mundo es responsable de la asistencia
efectiva de un estudiante a la escuela: desde los padres, la sociedad y las
Administraciones públicas. Según el la Ley Orgánica 1/1996, de 15 de enero, de
Protección Jurídica del Menor y de modificación parcial del Código Civil y de
la Ley de Enjuiciamiento Civil donde se mencionan que los poderes públicos
velarán para que los padres o tutores desarrollen adecuadamente sus
responsabilidades, en su artículo 13.2. expone: “Cualquier persona o autoridad que tenga conocimiento que un menor no
está escolarizado o no asiste en el centro escolar de forma habitual y sin justificación,
durante el periodo obligatorio, deberá comunicarlo a las autoridades públicas
competentes, que adoptarán las medidas necesarias para su escolarización.”
Os dejo el enlace de una noticia muy reciente, en la
que se ha sancionado a un padre de un menor con una multa porque no tomó
medidas necesarias para que su hija acudiera a clase, llegando al 65% de
inasistencia a clase en un mes.
http://cadenaser.com/emisora/2016/03/30/radio_valencia/1459352776_377070.html
http://cadenaser.com/emisora/2016/03/30/radio_valencia/1459352776_377070.html
Lo primero de todo debemos conocer y reflexionar sobre
el concepto de absentismo escolar, sus causas y sus manifestaciones o síntomas;
para después plantear un plan de prevención y acción.
1. ¿Qué
es el absentismo?
El absentismo es descrito en general como ausencia de
personas en lugares donde normalmente tienen que estar presentes. Es la
situación de inasistencia injustificada a clase por parte del alumno en la
etapa obligatoria de manera permanente y prolongada. Se produce absentismo
escolar, cuando los padres o tutores legales de los alumnos en edad de
escolarización, no justifican la falta continuada de asistencia a clase. Pero esta
definición, a mi parecer se queda corta, porque se refiere únicamente a la
última etapa del problema, cuando ya ha surgido y se ha producido una ruptura
con la escuela. Se olvida todo el proceso,
las fases por las que pasa este fenómeno, sus manifestaciones, etc. En
definitiva, si queremos abordar el problema desde esta última fase, se nos
complicaría mucho porque el problema ya está completamente desarrollado y apenas
se ha dejado margen para actuar.
El absentismo debe ser entendido como una respuesta de
rechazo por parte del alumno hacia el sistema escolar, que puede tener varias
manifestaciones y grados.
Con el fin de prevenir este problema, se deben
investigar las causas principales del absentismo:
2. Factores,
causas y tipos para la explicación del absentismo
Muchas personas tratan de explicar el absentismo
escolar a través de factores psicológicos del alumno, como baja autoestima,
ausencia de habilidades sociales, etc., o a causas sociológicas, como la
pertenencia a una minoría étnica, o a otras características sociales. Afecta en
su mayoría a sectores de población que sufren situaciones de marginación,
desventaja social o económica, pero no podemos dar por concluido que este sea
el factor principal de este problema.
Por poner un ejemplo: “El número de alumnos absentistas varía, dependiendo de zonas y ciudades.
Por tomar un caso reciente (curso 2007-2008), aparecido en Escuela
(18/12/2008), en la ciudad de Barcelona el porcentaje se sitúa entre el 0’3 y
el 0’7%, afecta diferencialmente según estratos sociales y económicos y según
distritos de la ciudad. El estudio señala que el 0’7% del alumnado se salta
entre el 25 y el 75% de las clases, contadas por meses. Un 0’3%, de niños y
jóvenes es absentista crónico, falta a más del 75% de las clases. El 60’5% del
alumnado no se salta ninguna clase o menos del 25% al mes.” En cualquier
caso, la franja crítica de los 14-16 años es donde se produce un mayor
porcentaje de absentismo.
Las causas que provocan el absentismo escolar pueden
ser de diversa índole y podemos clasificarlas en:
-
Origen familiar:
a) Absentismo
de origen familiar activo: es aquel provocado por la propia familia. Los niños
son utilizados por la propia familia para asumir roles paternos, para hacerse
cargo de sus hermanos, etc.
b) Absentismo
de origen familiar pasivo: es aquel que nace como consecuencia de que la preocupación
y responsabilidad de la familia hacia la asistencia a la escuela es mínima o
nula por parte de los padres.
c) Absentismo
de origen familiar desarraigado: es aquel que surge en las familias
desestructuradas.
d) Absentismo
de origen familiar nómada: es aquel que nace como consecuencia que la familia
se dedica a realizar actividades temporales (feriantes, itinerantes, etc.),
produciéndose la ausencia del menor solo en periodos determinados.
-
Origen escolar: se manifiesta por
un rechazo y una falta de adaptación del alumno a la escuela. También se puede
deber a la falta de recursos de la misma institución educativa para atender las
dificultades y características de algunos alumnos que requieren un tratamiento
individualizado. E incluso acoso escolar, que lamentablemente está adquiriendo
protagonismo en nuestras aulas y que inevitablemente provoca el miedo y rechazo
a la asistencia a clase de los alumnos acosados.
-
Origen social: se produce cuando el
alumno se deja influenciar por la dinámica absentista de sus compañeros,
amigos, algún que otro profesor, por las condiciones o ambiente del barrio, por
condicionamientos culturales, etc., que no valoran la educación como apoyo para
el desarrollo integral de la persona.
Podemos clasificar el absentismo escolar según la
persistencia de las faltas en:
-
Intermitente: falta de vez en
cuando con una cierta periodicidad, a veces coincide con una asignatura en
especial o con un cierto día.
-
Puntual: falta consecutiva por un
hecho justificado.
-
Regular: falta continuada sin
justificar.
-
Absoluto o crónico: el menor no
asiste al centro.
3. Estudiantes de riesgo
Según el Informe del Ministerio de Educación
atendiendo a los indicadores de la OCDE, los estudiantes potencialmente
vulnerables al absentismo son:
-
Los que tienen un nivel bajo de educación
familiar.
-
Los que pertenecen al colectivo de inmigrantes
de primera y segunda generación.
-
Los que están por debajo del
rendimiento medio de comprensión lectora.
-
Los que cuya relación con el
profesor es negativa.
4. Acciones
y actitudes del profesorado
Aurora Mingorance Muley, profesora de Educación
Secundaria en Melilla, propone siete preguntas clave que deben hacerse los
docentes.
-
¿Qué es lo que hago para que mis
alumnos no trabajen?
-
¿Qué puedo hacer para que venir a
clase no sea un castigo para ellos?
-
¿Olvidan todo lo aprendido para el
examen?
-
¿Creen que no sirven de nada los
contenidos de mi asignatura?
-
¿Qué puedo hacer para que sepan en
todo momento el estado de su trabajo?
-
¿Qué puntuación puedo darles para
que les parezca justa?
-
¿Qué métodos puedo utilizar para
evaluar mi asignatura?
Para esta profesora, la intervención docente
facilitará el éxito. “Hay que escalonar
los contenidos, ejercicios, actividades, etc., graduando los niveles para que
puedan ser resueltos correctamente por los alumnos”.
Según Enrique Salanova, el profesorado debe plantearse
un triple objetivo en su acción docente:
-
Suscitar el interés.
-
Dirigir y mantener el esfuerzo.
-
Lograr el objetivo de aprendizaje
prefijado. Ya que los estudiantes con metas están más motivados que los que no
tienen ninguna.
Por otro lado, hay que mejorar las fuentes de comunicación
entre todos los miembros de la clase, y sobre todo entre la comunidad educativa
y las familias.
Ya que nunca encontraremos dos alumnos iguales, es
importante buscar y realizar actividades que impliquen mayor participación del
alumnado y que lo aprendido tenga significado y utilidad. Hay que presentar los
contenidos de una materia con actividades relacionadas con la vida cotidiana.
Un buen y gran ejemplo de buenas prácticas para el
absentismo escolar, es el conocido César Bona, uno de los 50 mejores maestros
del mundo según el Global Teacher Prize,
que consiguió, dentro de este ámbito, reducir el absentismo escolar y el
analfabetismo en niños de etnia gitana a través de algo que los niños conocían
muy bien…
Os dejo el vídeo aquí para que podáis comprobarlo:
Recomiendo que veáis “Un barrio que educa”, un documental donde se muestran las buenas
prácticas educativas que se llevan a cabo en las escuelas infantiles, los
colegios, institutos y en el centro de adultos del Polígono Sur, en Sevilla. Los
profesores son ejemplo de superación. Muestran cómo intentan compensar las
dificultades asociadas a una zona de exclusión y de impulsar la formación del
alumnado como camino para conseguir un futuro más próspero. La intención no es
solo transmitir conocimientos y valores a los estudiantes, sino que va más allá
y pretende implicar a sus familias y a toda la comunidad en la mejora del
barrio.
Podéis visitar la página web oficial de esta iniciativa pinchando aquí, donde podéis descargaros el documental entero.
Os dejo un ejemplo de esta iniciativa
esperanzadora con este vídeo, El árbol de los sueños:
Y aquí el vídeo completo del documental:
La educación es una herramienta para generar cambios
positivos en los individuos. Las escuelas son lugares adecuados donde se puede
lograr de una manera organizada y civilizada. Cada sociedad desea educar a sus
ciudadanos de acuerdo con sus valores, objetivos y deseos. Sin embargo, las
escuelas tienen dificultades para llevar a cabo esta tarea. Pero el lugar donde
se pueden encontrar soluciones es de nuevo los propios centros educativos, así
que tratar de resolver estos problemas fuera de las instituciones que tienen la
competencia educativa, puede agravar el problema.
Dentro de esta realidad educativa nos encontramos con
el fenómeno del absentismo escolar. La actitud absentista resulta de la desmotivación
y conducta desafiante, con la pérdida de interés por el ámbito educativo, que
impide su desarrollo normal y, por tanto, el avance en su formación escolar y
personal.
La educación es tarea de toda la sociedad. Hay que
situar el fin de la educación en la persona. Esto supone desarrollar políticas educativas
que contemplen la formación del individuo desde el nacimiento hasta la muerte. Supone
trabajar por la igualdad de oportunidades desde el momento mismo de nacer,
intentando paliar las desigualdades sociales desde la más tierna infancia. El Estado,
las autonomías y los ayuntamientos deben trabajar juntos en este sentido,
revisando y reformulando el papel que los servicios sociales deben cumplir.
WEBGRAFÍA:
Área de Educación para la comisionada del Polígono Sur. (2015). ‘Un barrio que educa’: el documental que muestra las buenas prácticas educativas del Polígono Sur. 04/05/2016, de Participación y Equidad de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía Sitio web: https://poligonosurelbarrioestuescuela.wordpress.com/2015/03/26/un-barrio-que-educa-el-documental-que-muestra-las-buenas-practicas-educativas-del-poligono-sur/
JIMÉNEZ, Á.. (2012). Buenas prácticas para la prevención del absentismo y abandono escolar. 04/05/2016, de Promoting School Attendance Sitio web: https://issuu.com/angelsjimenez/docs/manual1
TORRES REYES, A. . (2016). Condenado un padre por dejar que su hija faltara constantemente a clase. EL MUNDO, pp. 23-24.
HDL (2015) El árbol de los sueños: iniciativa contra el absentismo escolar en el Polígono Sur de Sevilla [Vídeo] Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=sLVQJCex2tY
La Sexta Noticias (2015) César Bona reduce el absentismo escolar en niños de etnia gitana a golpe de rumba [Vídeo] Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=wwoCTlhQRBQ
Sevilla Directo (2015) Un barrio que educa [Vídeo] Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=vvSdSsspnU0
URUÑUELA NÁJERA, P. Mº. (2005). “MENORS EN EDAT ESCOLAR:CONFLICTES I OPORTUNITATS”. 04/05/2016, de I JORNADES “MENORS EN EDAT ESCOLAR:CONFLICTES I OPORTUNITATS” Sitio web: http://weib.caib.es/Documentacio/jornades/jornades_menors/p_urunuela.pdf
Me ha encantado escuchar a César Bona y no puedo estar más de acuerdo con el.
ResponderEliminarFalta humanidad dentro de nuestras aulas y creer en los niños que hay dentro de ellas.
Es un trabajo que tenemos que hacer entre todos y no dejarnos por el camino niños.
Hay que hacer que los niños tengan ganas de aprender, se ilusionen y quieran experimentar y descubrir cosas cada día que les hagan crecer como personas.
El absentismo es un problema que ya lleva afectándonos desde hace tiempo, y creo que es por la falta de interés y el horror que se le está haciendo a la educación, llevando al muy temido fracaso escolar. Esta es una de las razones por la que se necesita una urgente reforma educativa, ya que este problema solo puede ser solucionado si se motiva a los niños a aprender y a descubrir cosas por ellos mismos, y no podría estar más de acuerdo con lo que se dice en los vídeos.
ResponderEliminarCreo que el absentismo es un problema en gran parte de los maestros, ya que si hicieramos las cosas bien, atractivas e inculcando a los niños ganas de descubrir y aprender el porcentaje de absentismo bajaría una barbaridad.
ResponderEliminarDebemos hacer la escuela atractiva, puesto que son niños y no deberían ir a un sitio al que no les gusta, si la escuela se plantease de otra manera todos los niños tendrían ganas de acudir a los centros a aprender.
El planteamiento que hace César Bona me parece perfecto, deberíamos dejar que los niños nos enseñen la realidad desde su punto de vista para aprender de ellos.
Como dice Marta yo también estoy de acuerdo en que el gran problema del absentismo lo creamos nosotros como educadores, si no hacemos atractivo el proceso de aprendizaje los niños no querrán asistir al colegio y se sentirán obligados a ello, yendo con desgana, queriendo llegar ya a su casa e intentar quitarse este "trámite" lo más rápido posible. Para ello nosotros deberemos fomentar esas ganas de asistir a la escuela para aprender para que conciban el aprendizaje como algo divertido y como algo útil para ellos.
ResponderEliminarHay otros factores que influyen en este absentismo, algunos de los padres de los niños no consideran la educación de sus hijos como algo importante y son ellos mismos los que hacen que los niños no vayan al colegio. Una intervención respecto este aspecto es hacerles entender a los padres la importancia que tiene que sus hijos acudan al colegio y para ello deberemos aportarles los recursos necesarios para que esto sea posible.
Como bien dicen Marta y María, el absentismo como tal creo que es un problema que es creado por los propios profesores, ya que si las clases le resultaran atractivas al alumno, el ir a clase no debería de resultar ningún problema para el alumno.
ResponderEliminarPara que el absentismo radique, es primordial que los profesores creemos las ganas de asistir a clase y disfrutar con la educación.
Como bien dice María, existen también problemas que "quitan culpa" de esta situación a los profesores como por ejemplo la poca motivación que tienen algunos padres hacia la educación, la cual se trasmite también a sus hijos.