Lo primero que hay que dejar claro, es que todas las personas somos completamente diferentes los unos de los otros, y eso es lo que nos hace verdaderamente especiales.
En este caso los alumnos con altas capacidades, también son diferentes del resto, factor que no les hace mejores ni peores por esta cualidad, sino que simplemente tienen una serie de características que los diferencian notablemente del resto de sus compañeros.
Vamos a comenzar dejando claro quienes son los niños con altas capacidades; los niños con altas capacidades se caracterizan por ser niños cuyas capacidades intelectuales son superiores a las esperadas por su edad o condición en la diversidad de acciones humanas. Sabiendo esto, tenemos un reto delante al que enfrentarnos, que se basa en que tenemos que solventar las carencias y dar respuesta a las necesidades educativas y personales que estos alumnos van a tener, y es aquí donde nos encontramos el verdadero desafío, y donde de verdad se nos pondrá a prueba como profesores, ya que dependerá de nosotros que estos alumnos consigan sacar todo su potencial, o por el contrario se quede en el camino como muchos de estos niños.
La inteligencia es una característica del ser humano, que hay que trabajar y poner a trabajar continuamente para conseguir de esta manera extraer el máximo potencial en todas las situaciones.
Se sabe que los alumnos con altas capacidades se caracterizan por :
- Aprendizaje más rápido que sus compañeros.
- Creación de ideas mucho más elaboradas y reflexionadas que compañeros de su edad.
- Preocupación de temas relativos a edades más superiores a la suya.
- CI superior a la media.
- Aburrimiento en aula común y con tareas mecánicas.
Es muy característico que estos alumnos no destacan especialmente en un campo, sino que despuntan en todas las áreas educativas.
Estas son algunas de las características más determinantes de estos niños, pero a pesar de todo esto, hay que tener claro que siguen siendo niños como cualquier otro, y que por ende van a tener las mismas necesidades y estímulos que sus semejantes.
En la mayoría de casos la superdotación, no es algo que sea muy común en las aulas, es más suele pasar completamente desapercibida ya que muchos de estos niños, debido a su facilidad para adquirir información se aburren en clase, lo que muchas veces acaba evolucionando en fracaso escolar y abandono escolar, a pesar de las capacidades superiores a la media anteriormente comentadas.
Este tema, se caracteriza por haber creado mucha controversia a lo largo de la historia educativa, y debido a esto se han realizado en muchas ocasiones actuaciones ridículas, en las que apenas se ha pensado en el bienestar del alumno, lo que ha derivado en un fracaso escolar y una situación de depresión y tristeza en el alumno, por lo tanto vuelvo a repetir, a pesar de ser alumnos con altas capacidades y de los que se quiere explotar completamente su potencial, hay que tener claro que son personas y además niños, repito esto por que hay casos en los que por culpa de intentar acelerar el proceso de aprendizaje y enseñanza de estos alumnos, se han realizado actuaciones que han destruido por completo la infancia del alumno.
Otro craso error a destacar en la educación actual, y que por desgracia también se ha cometido sobre estos niños, es no dejarles que desarrollen su creatividad y conocimientos, limitándoles a unos `` contenidos propios de su edad´´, impidiendo de esta manera que desarrolle el 100 % de su potencial, lo que es una verdadera pena. Esto ocurre porque muchos de los profesores que actualmente se encuentran ejerciendo en educación desconocen por completo este tópico y más aún como actuar ante la diversidad de alumnos que se les puede llegar a presentar.
Enfocándonos ya un poco más desde el punto de vista médico, hay dos modelos científicos que se han encargado de investigar sobre este tema a lo largo de la historia:
El modelo de los Tres Anillo de Renzulli (1978), se caracteriza por ser un modelo que se utilizó pero no acabó aceptándose debido a que no tenía en cuenta las circunstancias externas al niño en el momento en el que se media su coeficiente.
Y el modelo de interdependencia Triádica, es el modelo que se utiliza actualmente, y que además de tener en cuenta lo dicho en el modelo anterior, también presta especial atención al ámbito familiar, escolar y amigos, ya que obviamente son estos tres los principales aspectos que van a afectar al desarrollo anímico e intelectual del alumno.
Otro elemento destacable de estos alumnos es la gran cantidad de problemas que les suelen surgir con los compañeros de su misma edad, debido a que tienen una maduración emocional e intelectual bastante superior a la de sus compañeros, lo que hace que se interese por cosas que el resto de compañeros no van ni a considerar.
Estos problemas de interrelaciones con sus semejantes, pueden llegar a provocarles situaciones de depresión, que derivan en una baja autoestima y una infravaloración por ellos mismos de sus capacidades.
Para evitar ``perder´´ por el camino a estos niños, el profesor es una figura clave, ya que será el encargado de realizar intervenciones para evitar este abandono, intervenciones de tipo adaptaciones curriculares o modificación de ejercicios para este alumno, de esta forma el alumno se encuentra integrado con su clase, además de trabajar a un nivel superior al resto.
Otra acción que el profesor puede realizar, y evitar así que el alumno sea excluido del grupo, es que una vez haya terminado sus ejercicios, ayude a sus compañeros con los suyos, de esta forma este alumno se sentirá mucho más útil y con una autoestima mucho más alta, además de encontrarse completamente integrado en el aula.
La sociedad actual desconoce por completo a estos niños, y sus características, lo que provoca que no se actúe correctamente en la mayoría de las situaciones; en este caso se puede llegar a producir lo que se conoce como disincronía, que consiste en un desfase que puede manifestarse en el desarrollo personal, intelectual y emocional del niño; es decir, esta situación provocaría en el alumno un grave problema de desarrollo y crecimiento interior, lo que una vez más, limitaría a estos alumnos a la hora de sacar el máximo de su potencial.
Desde mi punto de vista, y a modo de conclusión, la sociedad actual se caracteriza por desconocer completamente este tema, y sobre todo muchos de los profesores que ejercen en centros educativos, lo que genera que los colegios tomen decisiones impulsivas y poco reflexionadas que posiblemente deriven en una carencia para el alumno afectado.
Considero mucho más útil una adaptación curricular de un contenido educativo propio del curso del alumno, que un avance de curso, ya no únicamente desde el punto de vista teórico y de temario, sino desde el bienestar del alumno, ya que al final con este avance de curso, lo que se consigue es separar a este niño de sus compañeros y semejantes de sus edad. Y si el alumno no se encuentra bien anímicamente y consigo mismo, va a ser imposible que consiga sacar el máximo potencial de él mismo, y jamás se generará en su interior un sentimiento de interés por aprender más, que al final es lo que se trata de buscar en todos los alumnos.
Quiero darle especial relevancia a la importancia del aspecto social del alumno; obviamente el aspecto intelectual en este caso es tremenda mente importante, aunque desde mi punto de vista, cualquier persona es incapaz de desarrollarse plenamente al cien por cien, si el campo social y de relación con los demás no lo tiene cubierto o estable, y con estos avances de curso es la situación que se puede llegar a generar en cualquiera de estos alumnos.
Es una pena que una persona con altas capacidades, no llegue a desarrollarse plenamente muchas veces como persona, debido a la sociedad y al modelo educativo que tenemos actualmente, así que invito a pensar a todos los lectores de esta reflexión si este sistema educativo es el correcto, siendo incapaz de dar respuesta a situaciones de vital importancia como estas.